El increíble aumento del precio de las acciones de Tesla este año creó un nuevo club de ricos, autodenominados «Teslanaires», un juego de palabras con el nombre de la empresa y «billionaires», que en español se refiere a los multimillonarios.
Las acciones de la compañía de autos eléctricos de Elon Musk han subido más de 700% durante 2020, convirtiéndola en la empresa de automotriz más valiosa del mundo.
Pero ha sido una montaña rusa para los inversores a largo plazo que pusieron su dinero en la firma, debido a las alzas y caídas que las acciones han experimentado desde que la empresa ingresó al mercado de valores hace una década.
Para aquellos que lograron resistir la volatilidad, ha sido un viaje hacia la riqueza.
Este mes marcó un hito para la compañía de automóviles cuando entró al S&P 500, un índice bursátil que incluye los títulos de empresas como Apple, Microsoft y Facebook.
Tan alto subieron las acciones de Tesla que la firma se convirtió en una de las 10 empresas más valoradas del índice.
Y no solo eso. Las acciones de Tesla ahora tienen un precio más alto que la valoración combinada de General Motors, Ford, Fiat Chrysler Automobiles y Toyota. Sin embargo, Tesla fabrica solo una fracción de los vehículos que durante décadas han vendido sus rivales más establecidos.
«Tesla es una acción muy polarizadora. Tiene sus seguidores, muchos de los cuales son dueños de autos Tesla, y una buena cantidad de críticos, particularmente en la comunidad financiera, que dicen que las acciones de la compañía están sobrevaloradas«, dice Will Rhind, director ejecutivo de firma de inversión GraniteShares.
«A los inversores que compraron acciones al inicio, les ha ido muy bien y, como resultado, algunos ahora son millonarios».
Gran parte del crecimiento del precio de las acciones de Tesla se debe al aumento de la venta de autos, impulsada por la fuerte demanda de China y las esperanzas de subsidios para vehículos eléctricos.
El giro hacia los coches eléctricos a nivel mundial ha puesto a empresas de autos como Tesla en un lugar privilegiado. Muchos inversores también creen que se espera un fuerte crecimiento en otras partes del negocio de Tesla, incluido su software de conducción autónoma y las baterías eléctricas.
¿Una empresa sobrevalorada?
Tesla salió a bolsa en junio de 2010 con un precio de US$17 por acción. Esta semana, ese precio llegó a más de US$650.
Con ese gigantesco salto en el valor bursátil -que además continuó subiendo durante la pandemia de covid-19- los críticos de Tesla dicen que está sobrevalorada.
En un informe publicado a principios de este mes, los analistas de la firma JPMorgan, señalaron que al utilizar prácticamente todas las métricas convencionales, las acciones de Tesla «no sólo están sobrevaloradas, sino que están radicalmente sobrevaloradas».
Pero otros expertos en inversiones argumentan que Tesla no debe ser vista como una empresa de automóviles.
«Parte del atractivo de Tesla para muchos inversores, es que la firma es más que una empresa de autos y el éxito de sus baterías abrirá muchas fuentes de ingresos», dice Edward Moya, analista de mercado senior de OANDA.
«Piense en el papel que está desempeñando Tesla en la transición de los combustibles fósiles a la energía eléctrica y el almacenamiento. En ese sentido, la pregunta para los inversores de hoy es, cómo valora la tecnología del mañana».
Tesla también vende paneles solares y baterías de almacenamiento para los hogares.
Los «Teslamillonarios»
Existe un verdadero ejército de seguidores que creen firmemente en Tesla y predicen que el precio de la acción seguirá escalando, convencidos de que la empresa de Elon Musk tiene un futuro brillante.
Uno de ellos es el ingeniero Jason DeBolt, de Los Ángeles, quien hizo su primera inversión en Tesla comprando 2.500 acciones por un costo de US$19.000.
«Comencé a invertir en Tesla en 2013 después de comprar un Tesla Modelo S y hacer un recorrido por la fábrica», cuenta. Desde entonces, ha seguido comprando más acciones y las 15.000 que ahora posee, tienen un valor cercano a los US$10 millones.
Está de acuerdo en que como inversor a largo plazo ha estado en una montaña rusa y explica que «fue muy difícil ver a los medios atacar a Elon y Tesla. Eso fue peor para mí que la caída del precio de las acciones, ya que sabía que eventualmente se recuperaría».
DeBolt es miembro del Club de Accionistas de Tesla y regularmente está en contacto con otros inversores a través del grupo de Facebook.
Otra experiencia es la de Scott Tisdale, quien vive en Nueva York. Comenzó a invertir en Tesla cuando vio por primera vez el Modelo S en 2013 y hasta ahora ha acumulado alrededor de 4.000 acciones, cuyo valor actual es cercano a los US$2,8 millones.
«Aún no he terminado de invertir porque creo que la verdadera historia está a punto de comenzar, y la gente ha estado diciendo que las acciones están sobrevaloradas desde antes de que comenzara a comprarlas», comenta Tisdale.
«Es increíble pertenecer a este creciente grupo de ‘Teslanaires’. Es casi tan satisfactorio como decirles a los detractores que yo tenía razón».
Lo que viene
Los expertos dicen que es poco probable que el precio de las acciones de Tesla experimente un crecimiento de más del 700% nuevamente el próximo año, lo que limita la cantidad de nuevos «Teslanaires».
También apuntan a la creciente competencia de empresas como Apple, que ha revitalizado sus planes para construir un auto eléctrico junto a sus rivales chinos.
«La competencia de Tesla tiene bolsillos más grandes y puede permitirse correr riesgos mayores», explica Moya de OANDA.
Por otro lado, los expertos también advierten sobre el riesgo de poner todo el dinero en una sola empresa y recomiendan invertir los fondos en distintas compañías.
via.www.eldia.com.do